8 de marzo Día internacional de la Mujer

Día Internacional de la mujer.
Gracias a mi gran amigo Fernando que ha escrito este articulo

El 8 de marzo se conmemora cada año el Día Internacional de la Mujer. En el siglo XXI podría parecer innecesario dedicar un día del año a reflexionar sobre la condición social de la mujer; sobre sus derechos y sus libertades, pero desgraciadamente son muchos millones de mujeres en todo el mundo las que siguen sufriendo discriminación en su trabajo; desigualdad de derechos sociales y legales; sometimiento a padres, hermanos y maridos, y violencia cuando intentan romper esas cadenas que desde siglos vienen sufriendo.
Esto significa que, aunque en los países desarrollados se haya avanzado algo en cuestión de derechos y libertades de las mujeres, aún queda mucho por hacer en todo el mundo. Es cierto que considerablemente más en los países del tercer mundo, salvo excepciones, pero también mucho en los países desarrollados, incluido el nuestro, donde son muy acusadas las diferencias salariales entre hombres y mujeres que desempeñan puestos similares; donde la mentalidad machista está presente en el hogar, en el ocio, en la cultura y, lo que es más grave, en la mente de esos hombres que someten a sus parejas a malos tratos y producen el trágico y macabro saldo de unas sesenta muertes cada año, pese a las medidas legales y de seguridad tomadas por el gobierno socialista en los últimos años.
Esos son los motivos por los que la ONU ha decidido impulsar la conmemoración cada año del día de la mujer, y crear campañas y programas de actuación encaminados a promover y proteger la igualdad de derechos de la mujer. Afortunadamente, pocas causas promovidas por Naciones Unidas han generado tanto y tan amplio apoyo como ésta, pero queda mucho por hacer. Tendrá que pasar más de una generación de jóvenes de ambos sexos, educados en esa mentalidad de igualdad de derechos y deberes, para que la situación social de la mujer se equipare a la del hombre. Esta es una tarea de todos y no podemos ni olvidarla, ni dejar de estar alerta cada día si queremos progresar en ese sentido.
En los últimos años, el Día Internacional de la Mujer ha adquirido una dimensión mundial para las mujeres de los países desarrollados y en desarrollo. El creciente movimiento internacional de la mujer, reforzado por las Naciones Unidas mediante cuatro conferencias mundiales sobre la mujer, ha contribuido a que la conmemoración sea un punto de convergencia de las actividades coordinadas en favor de los derechos de la mujer y su participación en la vida política y económica. El Día Internacional de la Mujer es cada vez más una ocasión para reflexionar sobre los avances conseguidos, exigir cambios y celebrar los actos de valor y decisión de mujeres comunes que han desempeñado una función extraordinaria en la historia de los derechos de la mujer. Y así se fundó el día internacional de la mujer.
Pero por qué esa fecha del 8 de marzo para celebrar un día dedicado a los derechos de las mujeres; una jornada que primero se llamó “Día de la mujer trabajadora”, y que al estar respaldado por las Naciones Unidas han pasado a llamarlo “Día internacional de la Mujer”.
Al principio, en efecto, era un día para reivindicar sobretodo los derechos laborales de las mujeres, lo mismo que el 1 de mayo lo era para todos los trabajadores; pero ahora es para reivindicar todos los derechos de las mujeres: laborales, sociales, familiares, religiosos, culturales… es decir, para que no haya ningún motivo de discriminación de las mujeres con respecto a los hombres. En algunos países es día no laborable.
Durante muchos años se ha venido diciendo que la conmemoración en este día se debía a un hecho trágico ocurrido en la ciudad de Nueva York a principios del siglo XX, pero investigaciones más recientes han venido a demostrar que el origen del día de la mujer tiene precedentes más antiguos y su celebración el 8 de marzo obedece también a otros motivos.
La idea de un día internacional de la mujer surgió al final del siglo XIX en plena revolución industrial y auge del movimiento obrero. La celebración recoge una lucha ya emprendida en la antigua Grecia por una mujer llamada Lisístrata, quien empezó una huelga sexual contra los hombres para poner fin a la guerra. Durante la Revolución Francesa, las mujeres de París que pedían "libertad, igualdad y fraternidad" marcharon hacia el palacio de Versalles para exigir el sufragio femenino; derecho que no fue conseguido hasta el siglo XX gracias a la lucha desarrollada en distintos países por grupos de mujeres llamadas sufragistas.
Fue en los primeros años del siglo XX cuando se comenzó a proclamar, desde diferentes organizaciones internacionales de izquierda, la celebración de una jornada de lucha específica para la mujer y sus derechos.
En 1910, la Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas, reunida en Copenhague, proclamó el Día Internacional de la Mujer Trabajadora, a propuesta de la dirigente comunista alemana Clara Zetkin, como una jornada de lucha por los derechos de las mujeres. La propuesta fue aprobada unánimemente por la conferencia de más de 100 mujeres procedentes de 17 países, entre ellas las tres primeras mujeres elegidas para un parlamento, el de Finlandia.
Como consecuencia de la decisión adoptada en Copenhague el año anterior, el Día Internacional de la Mujer se celebró por primera vez el 19 de marzo de 1911 en Alemania, Austria, Dinamarca y Suiza, con mítines a los que asistieron más de un millón de personas, que exigieron para las mujeres el derecho de voto y de ocupar cargos públicos, el derecho al trabajo, a la formación profesional y a la no discriminación laboral.
Menos de una semana después, el 25 de marzo, según un estudio de la historiadora Isabel Álvarez González, más de 140 jóvenes trabajadoras, la mayoría inmigrantes italianas y judías, murieron en el trágico incendio de la fábrica textil Triangle Shirtwaist Company en la ciudad de Nueva York, provocado por las bombas incendiarías que les lanzaron ante la negativa de abandonar el encierro en el que protestaban por los bajos salarios y las infames condiciones de trabajo que padecían. Este suceso tuvo grandes repercusiones en la legislación laboral de los Estados Unidos, y en las celebraciones posteriores del Día Internacional de la Mujer se hizo referencia a las condiciones laborales que condujeron al desastre.
En el marco de los movimientos en pro de la paz que surgieron en vísperas de la primera guerra mundial, las mujeres rusas celebraron su primer Día Internacional de la Mujer el último domingo de febrero de 1913. En el resto de Europa, las mujeres celebraron mítines en torno al 8 de marzo del año siguiente para protestar por la guerra o para solidarizarse con las demás mujeres.
Entre 1914 y 1917 la primera guerra mundial impidió la celebración de esa jornada reivindicativa, pero en 1917, poco antes de terminar la guerra, como reacción ante los 2 millones de soldados rusos muertos en ella, las mujeres rusas escogieron de nuevo el último domingo de febrero para declararse en huelga en demanda de "pan y paz". Los dirigentes políticos de todas las ideologías criticaron la oportunidad de la huelga, pero las mujeres la hicieron. Cuatro días después el Zar de Rusia se vio obligado a abdicar y el gobierno provisional concedió a las mujeres el derecho de voto. Ese histórico domingo fue el 23 de febrero, según el calendario juliano utilizado entonces en Rusia, o el 8 de marzo, según el calendario gregoriano utilizado en los países occidentales.